¿Cómo hacer si la desgracia de vivir con miedo es ignorada por un gobierno mientras el otro sostiene que sólo se enfrenta a la muerte con más muerte y a la violencia con más violencia? ¿Habrá modo de advertirles a los niños que estos últimos son los que están ganando la partida? ¿Y que ellos serán las víctimas de todos los disparos en la espalda, sean ladrones policías o ambas cosas?