Concurren 600 niñas y niños a la escuela salteña de Alto La Sierra. De adobe, con décadas de existencia, creció a fuerza de reclamos que la etnia wichí fue haciendo incesantemente. Ahora está tomada por pobladores, docentes y alumnos para reclamar por su estado. Con baños destruidos, con pozos hundidos, con paredes que se caen y techos volados.