Dos caras de la misma moneda: fuerzas federales y armadas para controlar la población y extranjerización del Paraná para garantizar el saqueo de las riquezas argentinas a través del manejo de los puertos. Lo que se anunció hace dos años en Paraguay hoy se completa en la Argentina del señor Milei y su ministro Caputo que exhibe, sin pudor, la bandera del imperio en su solapa.