Natalia Melmann, asesinada una vez más

(APe).- Diecisiete años después, Natalia Mellman fue nuevamente victimizada. El ex sargento de policía Ricardo Panadero fue absuelto (*). La violación y el crimen de Natalia siguen ocurriendo. Una y otra vez a lo largo de 17 años. Y la justicia repta como una serpiente huyendo de los estrados de la verdad.

Natalia Melmann sigue siendo esa nena de 15. Bella. Fresca. Transparente. Con un par de oyuelos cuando sonreía.

Ricardo Panadero, el sargento de policía que quedó fuera del juicio hace 16 años y fue sentado en el banquillo en este año, es quien ríe hoy por hoy. Por su propia libertad. Por sentir que la verdad escapa mientras se abren las puertas para que los verdugos gocen de la vida. Protegidos por las balas de goma policiales contra las organizaciones que apoyaban a la familia Mellman tras la lectura de la sentencia.

Como escribíamos en APe hace apenas un mes: “Una serpiente asilada en el trono de la justicia pero a la vez en cada uno de los tronos que -imperturbable- construyó y abonó la condición humana para desmadrarse y perpetrar la ferocidad de lobos devoradores de vidas”.

Alguna vez, deberá existir para Natalia y todas las natalias de la historia oleajes transparentes de ternura que arrasen con los estruendos de la impiedad.

(*) Panadero fue juzgado por “privación ilegítima de la libertad agravada por el uso de violencia, abuso sexual agravado por acceso carnal y por la participación de dos o más personas y homicidio agravado por la participación de dos o más personas y criminis causa”

Edición: 3645