Un balazo en el techo de la escuela

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(APE).- Marcelo Bernachea aparentemente estaba trepado al muro de la escuela de su barrio cuando un tiro disparado por el sereno del lugar le dio en el pecho y murió.

 

Eran alrededor de las 6 y media de la mañana del sábado 8 de marzo cuando Marcelo salió de trabajar en la panadería de la calle La Meca, entre Montserrat y Gurruchaga, informó el diario Clarín. El chico, de 16 años, caminó por esta calle de Florencio Varela tres cuadras. Ya amanecía cuando en la esquina de San José —frente al edificio de la Escuela N° 17— se encontró con algunos amigos que venían de una fiesta.

En ese momento, de acuerdo con la versión de varios testigos, el sereno de la escuela empezó a disparar. También contaron que se escucharon unos ocho tiros. Mientras el resto se escondía, Marcelo no pudo bajar. Quedó solo arriba del muro. Hasta que cayó, agarrándose el pecho. Una bala le había dado en el torax. El muchacho —que vivía a tres cuadras del lugar junto a su mamá y tres hermanos— murió antes de llegar al Hospital Evita.

La versión policial no coincidía con lo que ayer contaban los vecinos. Las primeras noticias que se conocieron decían que el sereno había escuchado unos ruidos en el techo de la escuela. Según esta versión, el grupo de chicos estaba subido al techo. Aparentemente, el vigilador —del que ayer no se conocía su identidad— había creído que eran ladrones.

La versión despertó el enojo de los familiares y vecinos de Bernachea quienes se juntaron ayer frente a la Escuela N° 17. Pedían la renuncia de la directora y del presidente de la Asociación Cooperadora que, según decían, eran los responsables de haber contratado al sereno.

Fuente: Clarin, 11 de marzo de 2003

 


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